¿A qué juega el Real Madrid?*
“Prefiero ganar, después vamos a ver. De momento no hay discusión, lo que necesitamos es ganar”. El pragmatismo se ha apoderado de Luxemburgo. Las numerosas bajas, que también es mala suerte, han provocado que el técnico se apoye en un discurso crudo y realista, resultadista, vaya, en el que habla de jugar al contragolpe y de ganar como sea. Con un doble pivote formado por Segio Ramos y Diogo como el que se anuncia, pues parece lógico encomendarse a la victoria sea como sea. El problema es que sin la bajas, el Madrid tampoco juega a otra cosa. La gran cuestión es ¿a qué juega el Real Madrid? A principio de temporada, al menos, se impuso un debate futbolístico con aquello del ‘cuadrado mágico’ que ha pasado a mejor vida.
Una derrota hoy en Noruega reabriría una crisis que alguno cerró tras la victoria del sábado ante el Betis, pero que no tendrá ningún problema en abrir si caen ante el Rosenborg. Eso es lo que provoca el Real Madrid en los periodistas y en los medios de comunicación, más en los ‘pseudoafines’, que les hace dar virajes de 180 grados en sus opiniones sobre el conjunto madridista, por presiones o por resultados. Pero igual que el Real Madrid no sabe a que juega, los periodistas también pueden o podemos tener dudas de criterio. Aunque si sigues una línea de argumentación no la debes variar en función de los resultados. Porque el Real Madrid puede ganar, con bajas o sin bajas, con Ronaldo o sin Ronaldo, pero no está jugando bien, no tiene patrón de juego, puede ganar partidos, pero no entusiasma ni por asomo al madridismo y, por eso, genera tantas dudas dentro y fuera del club.
La dedicatoria de Guti de la nada brillante victoria ante el Betis, pero triunfo al fin y al cabo, a Di Stéfano y Sacchi se puede interpretar como una falta de respeto, especialmente a don Alfredo. Y su abrazo a Luxemburgo, como una muestra desmesurada de su compromiso con un entrenador que apenas le ha dado bola, al que va a sacar las castañas del fuego en varias situaciones delicadas, pero que en cuanto recupere a todos los efectivos prescindirá, con casi total seguridad, de Guti del once titular. Por eso su gesto se encuentra enmarcado en la más estricta generosidad y sus declaraciones en una sinceridad poco habitual que intentaron corregir desde el club para que rectificase sus afirmaciones. Se haya equivocado o no Gutiérrez, pienso que no debe ser sancionado por el club por sus palabras. Para mí su error fue no dedicárselo al responsable de la falta de planificación en el club, el único culpable de ese descontrol existente que provoca que el Real Madrid no juegue bien al fútbol, algo obligatorio para este equipo.
*Artículo de la sección Madrid me Mata que no salió publicado en Sport el 1 de noviembre
Una derrota hoy en Noruega reabriría una crisis que alguno cerró tras la victoria del sábado ante el Betis, pero que no tendrá ningún problema en abrir si caen ante el Rosenborg. Eso es lo que provoca el Real Madrid en los periodistas y en los medios de comunicación, más en los ‘pseudoafines’, que les hace dar virajes de 180 grados en sus opiniones sobre el conjunto madridista, por presiones o por resultados. Pero igual que el Real Madrid no sabe a que juega, los periodistas también pueden o podemos tener dudas de criterio. Aunque si sigues una línea de argumentación no la debes variar en función de los resultados. Porque el Real Madrid puede ganar, con bajas o sin bajas, con Ronaldo o sin Ronaldo, pero no está jugando bien, no tiene patrón de juego, puede ganar partidos, pero no entusiasma ni por asomo al madridismo y, por eso, genera tantas dudas dentro y fuera del club.
La dedicatoria de Guti de la nada brillante victoria ante el Betis, pero triunfo al fin y al cabo, a Di Stéfano y Sacchi se puede interpretar como una falta de respeto, especialmente a don Alfredo. Y su abrazo a Luxemburgo, como una muestra desmesurada de su compromiso con un entrenador que apenas le ha dado bola, al que va a sacar las castañas del fuego en varias situaciones delicadas, pero que en cuanto recupere a todos los efectivos prescindirá, con casi total seguridad, de Guti del once titular. Por eso su gesto se encuentra enmarcado en la más estricta generosidad y sus declaraciones en una sinceridad poco habitual que intentaron corregir desde el club para que rectificase sus afirmaciones. Se haya equivocado o no Gutiérrez, pienso que no debe ser sancionado por el club por sus palabras. Para mí su error fue no dedicárselo al responsable de la falta de planificación en el club, el único culpable de ese descontrol existente que provoca que el Real Madrid no juegue bien al fútbol, algo obligatorio para este equipo.
*Artículo de la sección Madrid me Mata que no salió publicado en Sport el 1 de noviembre
Escrito por Matallanas | 4:54 a. m. | Enlace permanente