Lo que une Pepe, que no lo separe nadie (Por Antonio Sanz)
EL RINCÓN DE JUDAS. ARTICULO PUBLICADO EN PUBLICO EL 18 DE JUNIO DE 2008
Por Antonio Sanz
España prepara el partido del domingo con parada en Salzburgo y fonda ante Grecia. Con el pensamiento en Viena y con la ansiedad en el equipaje, la calma y la esperanza deben presidir nuestras expectativas. España, sí la España de Luis, lleva sin perder desde noviembre de 2006. Acumula dieciocho partidos sin doblar la rodilla. Con mejor o peor fútbol, con o sin jugadores emblemáticos, con más o menos calor mediático, pero con unos datos objetivos que no admiten discusión. Aragonés puede igualar hoy las 36 victorias de Clemente. El de Baracaldo lo logró en ocho años; el de Hortaleza, en cuatro. Quizá por la efeméride, el seleccionador recupera generosidad. Repite secuencia mundialista. En Alemania otorgó posición en el campo ante Arabia a los suplentes. Esta noche, nuevamente primeros, toca retreta de reservas ante los helenos. Como sucedió entonces, Luis sacrifica al pichichi -Torres era el máximo goleador del torneo como hoy lo es Villa-, rota el centro del campo, da descanso a la cuestionada zaga y cambia el portero. No me gusta. Algunos jugadores ya disponen de suficiente premio entrando en la convocatoria como para conceder un extra. Admito cambios, pero no dar la vuelta al calcetín. Vamos, que nadie en Europa quita diez futbolistas de su alineación titular entre un partido de Liga y otro de Champions.
Pero si alguno merece jugar, ese es Pepe Reina. Primero, porque el seleccionador se la debe desde hace dos años. Aquella tarde en Kaiserlautern jugó Cañizares. Reina no abrió la boca, rumió por dentro y esperó. Que nadie sufra. El meta del Liverpool ha sido nombrado las tres últimas temporadas el mejor en su puesto en la Premier League. En Inglaterra se concede el ‘Guante de Oro’ al portero que más partidos mantiene a cero la portería. Reina la ha dejado en este año18 veces vacía. También logró el ‘glove’ en 2006 y 2007. No está mal la racha: tres de tres. Por eso, que nadie se ponga nervioso, y menos si pitan un penalti. En esta suerte, el madrileño tiene tanta destreza como arte ha demostrado uniendo a Villa y a Torres. Luis los pone en el campo, pero Pepe los alinea fuera. Gran amigo de los dos, de uno incluso es vecino, el buen rollo que desprenden los delanteros en el césped tiene un único culpable en el hotel. Que ironía, un portero dando bola a los goleadores. La misma ironía que persigue a Reina con Grecia. Debutará en un gran torneo internacional ante el mismo país contra el que debutó su padre con España, mantiene vivo el sueño de la Champions que perdió en Atenas y bautizó a su hija con el nombre de la nación de la Reina Sofía. Además, es un gran tipo. Y para cerrar el círculo, debutó con la absoluta en Gijón… la ‘patria’ de su amigo David. En esta Eurocopa todo queda en casa.
P.D. Me parece bien que Guardiola hable claro desde el primer día. Si el Barça va a cambiar que lo haga sin misterios y mirando de frente, aunque esto suponga que se resienta la bolsa de ingresos. A Deco, a Ronaldinho y a Etoo se han cansado de esperarlos.
Escrito por Matallanas | 4:16 p. m. | Enlace permanente