En todos los rincones de Alemania se sabe que mañana empieza el Mundial 2006. En Munich he podido comprobar como en cualquier local que entras o en cualquier escaparate de cualquier tienda hay motivos futbolísticos. Hasta en los bancos hay balones y camisetas con motivos mundialistas.
Os ilustro este post con una mini-galería de fotos en la que se aprecia todos los detalles 'kitch' de los que os hablo, no sé si ahora se dice 'friki', que te encuentras en el hotel, en un restaurante o en un desfile de moda femenina. Futbolines reproducidos en miniatura hasta en su más mínimo detalle, alfombras verdes pintadas como un campo de fútbol, una bota hecha de césped (artificial) que quedaría ni pintada en el salón de un futbolero o un adornito de un cacho de céped (articifial, claro) con una botita pequeñaja en mitad de la mesa del bareto donde te tomas un cervezón. Luego os cueno la última del maniquí del hotel. Me marcho para Kamen a recibir a España (me piro de Munich sin haberme tomado un 'codillazo' con mi amigo el 'Negro' Brotóns. ¡Habrá que volver!).

P.D. Felecidades a Roberto Palomar, que ayer cumplió años y no pude felicitarle de viva voz. ¡Vente p'al Mundial, Abuelo!