Luis-Torres: mírense a los ojitos
mata-dor. artículo publicado hoy en marca
JAVIER GÓMEZ MATALLANAS. Luis Aragonés y Fernando Torres mantienen una relación de amor-odio desde que el técnico de Hortaleza empezó a entrenar al delantero en la temporada 2001/2002, cuando ascendió al Atlético de Madrid a Primera división. La versión más tensa de su relación ha vuelto a aparecer tras el enfado de Torres por la sustitución ante Rusia. Hace una semana, en Santander, Luis Aragonés le dijo a Torres que era imprescindible para él, que iba a ser un jugador importantísimo en la selección para la Eurocopa. Una hora después del partido ante Rusia, el seleccionador comentaba: “Para mí, es titular indiscutible y no se debe enfadar porque le cambie”. Torres cree que si le considera imprescindible no le debe tratar así. En zona mixta, el Niño declaró que se había enfadado en caliente, pero que luego su mosqueo era consigo mismo por no haber jugado a un nivel superior y que Luis no le cambiase, precisamente lo que quiere el técnico de sus jugadores. Pero ayer, Luis Aragonés echó gasolina a la hoguera de una polémica que se podía haber apagado en privado, como tantas veces.
¿Por qué dijo Luis que esto no iba a quedar así? ¿Fue premeditado por su parte alimentar la polémica? El seleccionador considera que Torres se está equivocando y no ha querido tener en cuenta sus declaraciones públicas en las que aseguraba que el enfado es consigo mismo y que entendía que Luis le quitase para reforzar el centro del campo. Torres cree que si le considera imprescindible no le puede convertir de nuevo en el primer cambio, como ha sucedido en 30 de los 41 partidos en los que Luis le ha alineado de titular con España. La cohabitación entre Luis y Torres siempre ha sido complicada. El ahora seleccionador siempre ha confiado en sus condiciones físicas y en su potencia, pero dudó de sus condiciones técnicas y de su margen de progresión y llegó a recomendar a Jesús Gil que lo traspasara. La progresión de Torres en el Liverpool ha provocado que Luis valore más al Niño, pero no hasta el punto de considerarle intocable, porque, de jugar solo con un punta, Villa es el titular para Luis. Torres no quiere crear ningún cisma en el buen rollo que se palpa entre los seleccionados. Y ha sido Luis el que la ha montado diciendo enigmáticamente que “esto no puede quedar así”. ¿Le dejará en el banquillo? Nadie lo cree.
La relación entre Luis y Torres siempre ha sido difícil. En los momentos más críticos, los dos se esfuerzan al máximo para creer uno en el otro, aunque el delantero quizás se esfuerce más que el técnico. En los picos de amor entre el entrenador y el jugador, el rendimiento de Torres ha sido máximo a las órdenes de Aragonés, como en el Mundial de Alemania. Lo suyo es que se miren a los ojitos y se digan todo lo que se tienen que decir, que no se guarden nada y que aparquen sus rencillas de aquí al final de esta Euro2008, porque que su relación sea buena es clave para que España tenga posibilidades reales de ganar el campeonato.
Escrito por Matallanas | 11:44 a. m. | Enlace permanente