Hasta hoy nos he podido colgar este post. Sucedió el jueves pasado en el entrenamiento de Brasil. Un tío disfrado de Lula, del programa de Tinelli en la televisión argentina, uno de los varios enviados especiales del vacile que hay en el Mundial (tipo Caiga quien Caiga o ayer que estuvo un reportero de Buenafuente en la rueda de Prensa de la selección española), 'provocó' el incidente. El falso Lula gritó a los jugadores frases 'graciosas' para que le mirasen a cámara. Robinho quiso hacer la gracia metiéndole un pelotazo con tan mala fortuna para el centrocampista del Real Madrid que le pegó el balonazo a un fotógrafo brasileño (Antonio da Souza de O Globo). Algunos periodistas brasileños se enfadaron mucho con Robinho y las risas de sus compañeros y pidieron respeto a voces. Ronaldinho rápidamente se dio cuenta de que le podía haber hecho daño y se llevó las manos a la cabeza. Los brasileños comenzaron el entrenamiento y no fue hasta su finalización cuando Robinho se acercó al compañero gráfico y le pidió perdón (se aprecia a duras penas en la foto de abajo). El fotógrafo aceptó las disculpas y el resto de periodistas también. Por suerte, el compañero no sufrió ningún daño en la cara y la cámara no se le rompió, ¡qué cuestan un dineral!