De las vacaciones de Ronaldinho al emocionante atardecer de Zidane
Zidane: Precioso, emocionante, intenso, ilusionante su atardecer como futbolista. Su bajísimo rendimiento en su última temporada en el Real Madrid hacía vislumbrar un Mundial presidido por las sombras, pero Zizou se ha vuelto a erigir en el rey Sol de la Copa del Mundo. Ante Brasil volvió a interpretar esos pasos de baile con la pelota cosida a sus botas que agradan a todos los amantes del buen fútbol. Zizou fue bonito y bueno. Y aún le quedan dos partidos para hacernos disfrutar a los amantes del fútbol.
Ronaldinho: Se ha tomado unas largas, sospechosas y preocupantes vacaciones. A Ronaldinho, el considerado mejor futbolista del mundo, por galardones y por juego en la Liga y en la Champions, ni se le ha visto en los cinco partidos que ha disputado Brasil en este Mundial de Alemania. Seguro que vuelve porque es muy bueno. Pero es en un Mundial donde siempre han aparecido los grandes del balompié, salvo Di Stéfano que no pudo mostrarse en una Copa del Mundo por otras circunstancias. Se supone que después de esta decepción que ha dado a los futboleros, recuperará la sonrisa con el Barça. Ayer, hasta cuando estaban sonando los himnos su contagiosa sonrisa se tornaba en un feo gesto que predecía su horrendo partido ante Francia.
Ronaldo: Ha cumplido y ha batido el récord de Gerd Muller. Ronie ya se encuentra en el 'Olimpo' del fútbol como máximo goleador en la historia de los mundiales. Ayer los franceses no le dejaron ni olerla. Y aunque su Mundial ha sido positivo en lo personal, se ciernen muchas dudas sobre el tiempo que le queda de fútbol. Gol tendrá siempre y lo comprobaremos de nuevo en el Real Madrid o donde juegue la próxima temporada, si es que le llega alguna oferta, que pudiera ser.
Henry: Por fin apareció en un partido importante y marcó el gol de la victoria para los franceses. 'Titi' maneja el juego como nadie y se reserva, dosifica los esfuerzos, al máximo. Sabe competir como nadie, domina el 'otro fútbol' y es un superclase. Veremos si repite una gran actuación ante los portugueses en la semifinal. Ayer le robó la cartera a Roberto Carlos en el segundo palo y la mandó a guardar y mantuvo con su tanto a Francia en la senda de los que ganan.
Roberto Carlos: No estuvo y parece que no hay que esperarle. Da sensación, como a veces Ronaldo, de ex futbolista. Va sobrado y le queda mal hasta la camiseta por fuera. El Chelsea de Mourinho será su retiro dorado donde le veremos marcar algún gol con alguno de sus formidables cañonazos, que los tendrá cuando juegue en el equipo de veteranos del Real Madrid en pocos años. Su ocaso, su atardecer le ha cogido con el cielo cubierto de nubarrones y no es tan bonito como el de su amigo Zidane.
Makelele: ¡Qué exhibición! ¡Que portento en la recuperación, en la anticipación, en el robo, en el ganar el rechace! Siempre está en el sitio justo, perfectamente colocado, y no pierde cada balón que recupera como decía la leyenda urbana que propagó Florentino para venderle y destrozar su sueño galáctico. Porque la marcha de Makelele fue el fin del Real Madrid galáctico. Un 'Makelele' siempre es necesario para que funcione un equipo. Es el equilibrio, el que permite lucir a los que la juegan. Claude, flanqueando y asociándose en la presión con Patrick Vieira (otro 'todocampista' total, ¡qué futbolista!), se merendó a los brasileños en la zona ancha, permitió que Zidane luciese y lideró una victoria merecida para los de Domenech.
MaTA-dor
Escrito por Matallanas | 2:35 p. m. | Enlace permanente