Aguirre se ha ganado seguir en el Atleti (Por Antonio Sanz)
EL RINCÓN DE JUDAS. ARTÍCULO PUBLICADO EN PÚBLICO EL 11 DE MAYO DE 2008
Por Antonio Sanz
Es más que probable que esta noche el Atlético de Madrid celebre su clasificación para disputar la próxima Liga de Campeones. Después de una dura travesía, con descenso al infierno, no ascenso y vuelta al lugar de origen, la consecución del cuarto puesto es un éxito. El entrenador es Javier Aguirre, el mismo que se ha ganado continuar en el cargo. Le pidieron, cuando llegó, una doble misión: primero, meter al Atleti en la Uefa -lo hizo vía Intertoto- y después, jugar la previa de la Champions. Y no ha tenido un bienio sencillo. Aún así, Miguel Ángel Gil, tras su estreno, decidió unilateralmente renovar su contrato. ¿Por qué? Sencillamente por dar continuidad a un proyecto. Lamentablemente, y con la excepción de los dos años de Luis Aragonés, el paso de Manzano, Ferrando, Bianchi o Murcia fue efímero. Creo que Miguel Ángel es consciente de que cometió un error no renovando a Gregorio. Y por eso, amplió un año a César, temporada que no cumplió. Por eso, creo que la continuidad del mexicano era necesaria. Y por eso, creo que Aguirre merece seguir porque ha cumplido con lo que le han pedido. Incluso, tuvo que ganar un pulso a Maniche, contar hasta cien con Reyes o atreverse a jugársela con un infante de 17 años -Camacho-. Y todo esto más solo que la una porque los periodistas que tanto le jaleaban o se reían con sus ocurrencias en Pamplona le han ido dando la espalda. O desde dentro del club, que sólo cuenta con el respaldo del dueño. Entretanto, la afición le ha protestado e incluso osaron pedir su cabeza tras el resbalón sufrido ante el Betis. Dicen que el equipo no juega bien. No han bastado tramos de buen juego y verse tan alto en la Liga, algo que muchos no recordaban desde el doblete.
Cuando menos se esperaba, Gil Marín le confirmó en el cargo esta misma semana delante de su amigo-agente -así nos lo contó Matallanas-. Es justo. Lo que no es justo es que antes de acabar ya se vendía su relevo. Desde la esfera deportiva del club se buscan alternativas. Y surge el conflicto. Cada uno cuenta con su candidato. Si García Pitarch apuesta por Quique Sánchez Flores, Cerezo lo hace por Unai Emery. Algún consejero plantea a Marcelino. Y sobre la mesa del consejero delegado se echan dos órdagos: Benítez y Mourinho. El dueño del Atleti decide no considerar las opciones de estos últimos porque sus peticiones deportivas, en forma de jugadores, se salen de presupuesto. Tampoco se arriesga con los técnicos revelación de la Liga. Y con Quique tiene demasiadas dudas. Con este escenario, se ha decidido por mantener a Aguirre. Y Javier no lo tendrá sencillo. Ya sabe que ni el presidente ni el director deportivo le quieren. Entre otras cosas porque Cerezo ya le avisó personalmente que no cree que sea el idóneo para el puesto. Qué extraño. Es el mismo presidente que clamó por su fichaje cuando se apostó por Bianchi. Hoy, el técnico mexicano es consciente de que al primer resbalón volverán las críticas. Pero cuenta con el refuerzo de los resultados. Los únicos que le sostienen. Los mismos que te dan y te quitan del banquillo. El debate es ahora si Gil Marín tiene credibilidad para mantener su apuesta. Pero nadie me explica por qué con el Atleti cuarto en la tabla sólo el dueño quiere que Aguirre repita.
Escrito por Matallanas | 5:20 p. m. | Enlace permanente