Y yo digo: "Luis vete a Estambul"
el rincón de judas. artículo publicado hoy en público
Por Antonio Sanz
La Selección va a disputar la final de la Copa de Europa. Después de defender al seleccionador los últimos dieciocho meses, me siento en la obligación de gritar que Luis debe marcharse a Estambul. O a dónde quiera. O a donde le entiendan. O a donde le admitan ese guiño de ojo que nunca sabré si es certero. Ni sus amigos, ¿tiene?, son capaces de asumir la verdadera historia de lo sucedido en Austria. Somos finalistas. Somos los mejores. Somos tan insoportables que Luis decide cambiar su estrategia. Un vez más. Una prueba más de deslealtad. Los que le ven tan lejos comprenden su actitud. ¿Cómo? Cuarenta años de profesional demuestran que la buena fortuna le acerca al buen sentido. No sé si al entrenador. No sé si al buen momento que nos preside. La trayectoria aproxima a un fenomenal grupo que desea pelear con Alemania por una transición. No estará Villa. ¡Qué desahogo para el de los cambios! Sobre todo porque en la final el de Hortaleza volverá a mostrar el cartel del ‘9’. ¡Qué más da! Estamos donde queremos. Estamos donde necesitábamos. Estamos dónde somos capaces de soñar. No pasa nada. Lo mejor es que el grupo es capaz de sobrepasar el momento. Luis, aún, no ha firmado con el Fenerbahçe. No llega tarde. Le esperan con los brazos abiertos. España, con la crisis, se deja más de mil euros en el desplazamiento. Da igual. Por lo demás, es el momento de que el seleccionador decida marcharse y aparcar su éxito. No es llegar. Es mantenerse. Se supone que el técnico es capaz de todo. Por ahí estamos en el sentido de las cosas. Hierro tiene cerrados casi diez contratos. Padrón insiste en la partida. El canario lo tiene tan claro como prender la luz. Villar, que se enteró por los periodistas de la propuesta de su vicepresidente, elevó el freno de mano. Jorge Carretero, el portavoz, se comió el marrón. Incluso se atrevió a desmentir la verdad. Está en su papel. No debemos castigarle por eso. Por tanto, Aragonés cierra hoy su etapa y España se lo agradece. Es justo. Vamos a levantar la copa. Vamos a celebrar el título. Vamos a desterrar tanta tristeza. Vamos a salpicar el buen hacer. Alemania es la experiencia. Son capaces de mancillar el destino. Desde entonces, apunta a la diana. Dice mi amigo Duro que me quite la bata blanca. Asumo la defensa de que España necesitaba al sabio. Pero, hoy ya no.
Escrito por Matallanas | 11:30 a. m. | Enlace permanente