El Pipita y el silencio
mata-dor. artículo publicado hoy en marca
Hay jugadores más mediáticos y futbolista de un perfil bajo que aunque rindan y sean decisivos en el terreno de juego su figura no transciende en los medios de comunicación al nivel de su fútbol.
Son muchos factores los que pueden provocar estas situaciones como la forma de ser el jugador o que otros futbolistas sencillamente son más mediáticos y cuentan con el apoyo periodístico por lo que han hecho en su carrera, aunque su aportación a su equipo sea inferior al compañero sobre el que se cierne el silencio o la indiferencia informativa.
En esa situación de indefensión o de falta de apoyo mediático se encuentra Gonzalo Higuain. El delantero argentino se ha ganado en el césped, gol a gol, siendo decisivo en las dos últimas Ligas que ganó el Madrid, una jerarquía que no se traduce ni en contar con opciones para ser titular.
Ya la temporada pasada cuando era el delantero más en forma, Juande Ramos decidió dejarle varios partidos de suplente y el debate permanente que rodea al Madrid hasta por las alineaciones no se centró en analizar los motivos de la suplencia de Higuain.
Esta temporada, el Pipita ha descendido un peldaño con la llegada de Benzema y con el nuevo y jaleado renacer de Raúl. Higuain confía ciegamente en sus posibilidades y está convencido de que meterá la cabeza en el equipo y será importante en el Madrid de Florentino.
Es cierto que en ningún momento Higuain ha estado en el mercado y que todo el verano le han considerado intransferible. Porque también es cierto que si le llegan a poner en venta, el Real Madrid habría tenido ofertas. De hecho Miguel Angel Gil se lo pidió sin dudar un instante a Florentino cuando éste fue a sondear una compra pactada de Forlán.
El Real Madrid cuenta con un delantero de gran nivel en la suplencia y sus dirigentes saben que su salario no es competitivo y tienen pensado ofrecerle un aumento de sueldo. Higuain no piensa en eso, que se lo merece por otra parte, y sólo piensa en ganarse un puesto que ha demostrado que ya le debía pertenecer.
Escrito por Matallanas | 6:09 p. m. | Enlace permanente