JAVIER GÓMEZ MATALLANAS. Valencia o Getafe. Getafe o Valencia. Sólo uno puede ser el campeón. A ninguno le vale ser segundo. Baraja versus Casquero. Ahí va a estar la clave de la final de la Copa del Rey. El que salga victorioso de este enfrentamiento tendrá muchas opciones de hacer a su equipo campeón de Copa.

Se enfrentan dos modelos de fútbol, dos tendencias, dos conjuntos con miras muy distintas. El Valencia, obligado a ganar, a clasificarse para la Champions o la UEFA. El Getafe, cuyo único objetivo es la permanencia, alcanza su segunda final de Copa consecutiva. Pero en el centro del campo cuentan con dos futbolistas muy distintos, pero al vez muy iguales. Dos tipos como Casquero y Baraja que saben jugar al fútbol, que juegan bien. Dos medio centros con gran llegada, con gol. Dos centrocampistas dotados de gran técnica y manejo del tiempo del partido. Claro que en los dos equipos hay otros jugadores que pueden decidir la final como Villa, Joaquín, Silva o Morientes, por parte che, o Albín, Granero, Manu del Moral o De la Red, por parte azulona. Pero si rinde Baraja, el Valencia cuenta con todas las papeletas para ganar la final y si Casquero está al nivel que viene exhibiendo en las últimas dos campañas, el Getafe tendrá un gran techo recorrido para ser campeón.

Baraja y Casquero convergen en su paso por el Atlético Madrileño y en que ambos juegan de medio centro. Ambos cuentan con una gran técnica, un buen sentido táctico, pisan área siempre con peligro. Baraja ha sido internacional y Casquero llama ahora a las puertas de la selección. Los dos son grandes peloteros, evidentemente el Pipo ha sido más que Casquero (como el Valencia es más que el Getafe), porque ha ganado más que él. Pero Javi se encuentra en su mejor momento y los dos pueden ser claves en la final de esta noche.

En Valencia se quejan de que toda España va con el Getafe y que mediáticamente se ha alimentado esta preferencia. También estuvo toda la España futbolera con el Valencia cuando perdió la final de Champions ante el Bayern de Munich (y conviene recordar que cuando el Valencia perdió aquella final y la que también cayó ante el Real Madrid, el Getafe estaba en Segunda B y hoy juega su segunda final de Copa consecutiva para saber la diferencia futbolística e histórica ente Valencia y Getafe, al margen del mejor momento deportivo que vive ahora el Geta). Al Getafe le debe la historia una Copa del Rey y el fútbol justicia por la crueldad con la que perdió ante el Bayern. Pero también perdió cruelmente el Valencia ante el Bayern una final de la Champions y otra, con más justicia, ante el Real Madrid. El fútbol no sabe de justicia ni de cuentas pendientes. Se trata de una final y puede ganar cualquiera.

Baraja y Casquero. Casquero y Baraja. Sólo uno puede ser el campeón. Los dos son buenísimos. Uno, Rubén, fue muy grande y ahora pelea contra las lesiones para seguir siendo decisivo en el Valencia. Y al Pipo aún le queda fútbol y goles para ganar una final. Otro, Javier, vive el mejor momento de su carrera. Y Casquerito también tiene gol y sabe jugar para hacer campeón a su equipo. Getafe o Valencia. Valencia o Getafe. Sólo uno puede ser el campeón. A ninguno le vale ser subcampeón.