mata-dor. artículo publicado hoy en marca

Tomás, Ruiz, Julio Prieto, Marina y Quique Ramos. Estos cinco jugadores , formados en la cantera del Atlético, fueron titulares en la final de la Recopa celebrada el 2 de mayo de 1986 en Lyon., con Luis Aragonés en el banquillo.

Después de aquella hornada de futbolistas, aderezada con los Pedraza, Rubio, Pedro Pablo, Mínguez, Mejías o Abel, aparecieron en los 90 los Solozábal, López, Toni, Aguilera, Diego o Ricardo. Y ya en los inicios del siglo XXI apareció Fernando Torres, sin acompañantes, por aquello de la mala política de cantera de Jesús Gil que decidió prescindir de ella provocando que el símbolo del madridismo fuera un canterano colchonero, un atlético de pro como Raúl González Blanco, que cada vez tiene más complicado cumplir su sueño de la infancia de jugar de rojiblanco en el Vicente Calderón.

El Atlético siempre se caracterizó en su historia por ser un equipo formado en su base por canteranos y grandes jugadores nacionales y extranjeros. Collar fue canterano y Leal, también. En un momento en que la afición del Atlético no tiene más que motivos para la desconfianza y está indignada, por la mala gestión de sus dirigentes, por más que se hayan clasificado dos años consecutivos para la Liga de Campeones, los gestores del Atlético tienen una salida en la cantera.

Se cargaron el trabajo de años realizado en Coturruelo y se bloqueó la salidad de jugadores al primer equipo, formando un gran equipo filial que fue subcampeón de Segunda, por el cual el equipo colchonero facturó muchos millones por los traspasos de los Yordi, Ezquerro, Tevenet, Loren, Baraja, Gustavo y Cristián Díaz, entre otros. Pero había que montar de nuevo la cantera. Era necesario. Abel, primero, como secretario técnico y Toni Muñoz, después, como director de cantera, intentaron arreglar el desaguisado. Era una tarea complicada.

Sin demagogias baratas, el trabajo de otro responsable de cantera José Mari Amorrortu, al que también se mató cuando llegó por no tener pedigrí atlética, verá sus frutos en breve. El pasado domingo, en el estadio Alfredo di Stéfano, un grupo de chavales vestidos de rojiblanco maravillaron a los dos millares de seguidores madridistas que vieron como el filial del Atlético daba un repaso al Real Madrid Castilla.

Los Sergio, Regalón, Pulido, Atienza, Rubén Pérez, Keko, Joshua, Cedric y Borja demuestran que el Atlético tiene futuro si sus técnicos apuestan por la cantera. Deberían haber fichado a Riquelme y a Diego, era su obligación. Pero ya que no hay un euro en caja, que apuesten de verdad por la cantera. Que den de verdad una oportunidad a La Quinta de Borja y Cedric (¡salió ovacionado del estadio del filial madridista por los aficionados blancos!). Que recuerden que el Atlético siempre ha tenido muchos canteranos en sus filas y que con ellos han ganado títulos y han sido un grande de España. Que lo hagan ya. Que hagan algo con sentido común de una vez.