Bilardo y Menotti, a seis minutos de distancia
Aeropuerto de Munich. Terminal 1. Mostradores D. Bussines. 17.35 horas. Factura Bilardo. 17.41 Factura Menotti. Los mayores antagonistas del fútbol no se han cruzado por minutos al facturar para coger su vuelo rumbo a Buenos Aires. Menotti, qué viaja con su mujer, tardó en facturar más que Bilardo porque le daban Bussines y el aseguraba que su billete era de Primera Clase. Yo embarqué, super rayado, por cierto, y no pude comprobar como solucionó su problema Menotti, ya que, aunque facturaron en el mismo mostrador, podían volar en vuelos de Air France, Alitalia o KLM. A Bilardo le vi embarcar a Roma. A Menotti no le vi que vuelo tomó. No obstante, a pesar del enfado (no os voy a aburrir con detalles, pero ¡vaya tela con algunos alemanes!), no llevaba orejeras como otra veces que no me aguanto ni yo, y me llamó la atención que todos los periodistas y comentaristas argentinos, el propio Bilardo y el Bambino Vieira incluidos, llevaban colgada al cuello
la acreditación (¡con lo que pesa los últimos días esa cintita y ese plástiquito!). Desconozco sí fue un despiste generalizado, aunque Menotti no la llevaba, o no se la habían quitado a propósito, como sí ese plástico, que tanto mola dejar visible en tú casa, reconozco, les diera acceso también a algún lugar en su país.Y el enfado tampoco me impidió imaginarme que al Narigón y al Flaco les habían sentado juntos, doce horas, hasta Buenos Aires. Menuda conversación, sí es que la hubiera o hubiese. Lástima que acabo de ver a Menotti tomando un café con su señora. Va en otro vuelo. Uno no podrá hablar del toque como búsqueda ni el otro argumentar lo del "Písalo, písalo..." 
MaTA-dor, embarcando en Berlín rumbo a Madrid con escala en Amsterdam
Escrito por Matallanas | 6:11 p. m. | Enlace permanente






