el rincón de judas. artículo publicado en público el domingo 17 de febrero de 2008

Por Antonio Sanz

Ha transcurrido un año y Ramón Calderón ha pasado de vejar en una conferencia universitaria a Guti a plantearle la renovación vitalicia a imagen y semejanza de Raúl y Casillas. Desconozco si el representante del ‘14’ es más exigente que Carvajal, el agente de los otros dos, pero unos acuerdos se han presentado antes que el otro. Es decir, el alférez ha adelantado al teniente en presencia del capitán. No importa. Tampoco importan los detalles económicos de lo que podríamos considerar contratos fantasmas. ¿Raúl va a seguir cobrando con 33 años el mismo pastón que hoy? Considero que sería una temeridad para el socio condenar el presupuesto del Real Madrid por el mero cumplido de la lealtad a la causa. Pero tampoco podemos esperar mucho de un dirigente que destroza la imagen del club y presenta su corbata sin una mera arruga. ¿Ah? Que hablamos de Guti.

Remo a contracorriente con un jugador que ha despertado la identidad dormida de muchos que, amagados, arropaban en silencio la destreza de este mediocampista. Hoy alzan la voz y la pluma. Sorprende cuando exigen la presencia del futbolista en la selección. ¡Cómo si fuera un habitual! Claro, la falta de memoria es transitiva en el fútbol. Nadie recuerda que Clemente ni consideró a Guti en dos temporadas y media. Camacho le permitió debutar y luego añadió dos convocatorias más en tres años. Iñaki Sáez le dio nueve oportunidades en dos campañas, incluyendo seis amistosos. El actual seleccionador contó dos veces con el distinguido artista en casi un lustro. Sin embargo, hoy es básico en función del periódico que eliges cuando tomas café. El dato no engaña: Guti, en casi trece años de profesional, ha disputado catorce partidos con la selección absoluta con cuatro entrenadores diferentes. Pero no me detengo aquí. En su estancia en el Real Madrid ha sido examinado por Valdano, Arsenio, Capello -en dos etapas-, Heynckes, Hiddink, Toshack, Del Bosque, Queiroz, Camacho, García Remón, Luxemburgo, López Caro y Schuster. El resumen alcanza a 25 partidos de media por temporada, pero desciende a 14 encuentros por Liga como titular. O sea, un tercio del torneo. Nadie alza la voz, ni la pluma, cuando su actual entrenador declara que es un “genio con sombras”. A todos les recuerdo que tras su expulsión en Murcia, el germano le condenó al banquillo. Da igual. Se trata de tocar el tambor y fastidiar un poco más a Luis por las últimas cuatro aceptables secuencias de Guti.

Me hace gracia escuchar que era azulgrana cuando fue niño. Algún indiscreto ‘amigo’ asegura que las fotos de Cruyff y Maradona presidían su habitación infantil. Tiene buen gusto. También recuerdo cuando estaba barriendo el rincón del Real Madrid y estuvo tan cerca del Atlético. Sí, porque al que hoy anuncian como jugador vitalicio, meditó cambiar el paseo por el río. El primer intento, con Cerezo volcado en la idea, lo derribó Bianchi por la esperanza puesta en un chico de la cantera que había conquistado Getafe -Gabi-. Al año siguiente, tras intercambiar mensajes de móvil dando el sí a un alto dirigente rojiblanco, Mijatovic puso el semáforo en rojo y frenó en seco el traslado. Quisieron pescar al rubio y a cambio le metieron a Jurado en el cebo. Pero hoy Guti ha despertado. ¡Aleluya! Ya no es la eterna promesa. ¡Cómo cambian los tiempos… y los discursos!