Luis no cobró de TVE
JAVIER GÓMEZ MATALLANAS. Los críticos de Luis Aragonés se quedaron con las ganas de que el seleccionador se metiera en algún charco en su comparecencia en el programa 'Tengo una pregunta para usted' de Televisión Española. Como no había por donde criticar la más que correcta intervención del seleccionador nacional, ha empezado a circular el rumor de que Luis Aragonés decidió comparecer porque recibió de TVE una importante cantidad de dinero. Que aceptó la invitación porque le pagaron (los expertos de la calumnia han puesto incluso una cifra: “le han dado 40 ‘kilos’”, o sea 240.000 euros, afirman con seguridad y rotundidad). Evidentemente, Luis Aragonés, según fuentes de la dirección de deportes de TVE, no se llevó ni un solo euro. Estos responsables de TVE aseguraban ayer que no era la única consulta que tenían en este sentido, y no ocultaban que habían recibido varias llamadas preguntando sí Luis había cobrado por participar en el programa conducido por Lorenzo Milá, síntoma del éxito con el que ha circulado la maledicencia.
¿Qué persiguen los que extienden este bulo? Pues desprestigiar a Luis Aragonés, que ha sido denostado y atacado con dureza desde la eliminación de España en el Mundial de Alemania. Ha habido ocasiones en las que el seleccionador se ha metido en conflictos de manera innecesaria y equivocada y las críticas tenían sentido. Pero la mayoría de los ataques que ha recibido no han sido por motivos futbolísticos. Se le ha machado por dejarse convencer por Villar y echarse atrás cuando dimitió, por cambiar de opinión, algo tan habitual en el ser humano. Y su decisión de no convocar a Raúl ha provocado una persecución interminable y cruel que pretende dejar los partidos de la selección en un segundo plano porque el de Hortaleza persiste en su decisión de no llamar al capitán del Real Madrid. Algunos de los periodistas que más le atacan, creadores de opinión, apuntan a su edad para descalificarle y no reconocen que el equipo que ha formado Luis es el que más se parece a sus pretensiones e ideal futbolístico.
‘Zapatones’, apodo que le puso su íntimo el periodista Valdivieso según reconoció en el programa, salió reforzado en su imagen tras su comparecencia televisiva, por más que también se le culpe de que la audiencia que tuvo no fue tan alta como los números que dieron Zapatero y Rajoy. También, desde el periodismo, se acusa a los 60 ciudadanos seleccionados para preguntarle de haber sido demasiados pusilánimes, muy blandos e inocentes en sus preguntas. Seguro que de haber sido profesionales de la información habrían realizado cuestiones más incisivas y agresivas. Pero lo cierto es que en las ruedas de Prensa de Luis las preguntas que se realizan no difieren mucho de las que le realizaron los ciudadanos el pasado martes, en un programa que fue visto en el mismo número que se siguen los partidos de fútbol ‘normales’ y que tuvo picos de más de 4 millones de espectadores.
Luis Aragonés estuvo enorme. Manejó bien el medio televisivo, su indumentaria fue adecuada y su puesta en escena fue buena, sus respuestas casi siempre directas, estuvo próximo, campechano, castizo y dicharachero (como es él en el trato). En el aspecto negativo decir que repitió su muletilla “y tal” de manera excesiva, como suele ser habitual, pero su mensaje llegó y atacarle por ahí y porque "no concluye las frases "se antoja un argumento torticero. A Luis también le faltó enfatizar en el orgullo que le supone dirigir a su país, como suele comentar en privado, y, quizás, le sobró negar al Atlético de Madrid, porque siempre estará ligado a la historia colchonera, por más que sea accionista del Espanyol. Y perdió una buena oportunidad de explicar, en términos futbolísticos, porque no cuenta con Raúl en su selección.
De cara a sus jugadores salió reforzado (estuvieron todos pegaditos a la tele, desde Liverpool a Mallorca, con la atención que se ve la final de un Mundial o una gala de Fama, y le dieron un sobresaliente) y también ha sido muy valorado por la gente del fútbol por su preámbulo en el que explicó que había aceptado la invitación para defender a los profesionales por los ataques que vienen recibiendo en las últimas fechas. En definitiva, Luis aprobó con nota para los aficionados, aunque los que van a por él sistemáticamente le siguieron atacando tras el programa, sin ver ningún mérito en su comparecencia. Todo porque, para su lamento, no la lío ni se enzarzó ni se metió en ningún charco. Así somos los invencibles. ¡Qué pena!
Escrito por Matallanas | 2:27 a. m. | Enlace permanente