Sudáfrica preside el horizonte (Por Antonio Sanz)
EL RINCÓN DE JUDAS. ARTÍCULO PUBLICADO EN PÚBLICO
Por Antonio Sanz
A poco más de cincuenta días para el Sudáfrica-México, la apertura del Mundial en Johannesburgo, la cita se aproxima con una mezcla entre emoción y temor. La expectación que siempre acompaña al evento dista del terror que provocan las lesiones en entrenadores y futbolistas. España arranca con demasiadas sombras físicas en algunos de nuestros mejores activos: Cesc se cuida el peroné, Iniesta agrupa sus fibras, Torres mima la rodilla, Senna administra el cansancio o Cazorla no da tregua de espalda. Pero no acaban aquí los problemas para Vicente del Bosque. Otros integrantes de nuestra roja -Villa, Silva, Xavi, Marchena o Navas- se protegen entre algodones de la carga de minutos que aprisiona sus facultades. Con todo, y con el grado de preocupación controlado en Las Rozas, las quinielas de futuribles siguen el caudal preconcebido. Desde Barcelona se agita con cierta coherencia la inclusión en la lista de Víctor Valdés y de Pedro Rodríguez. Si el meta crece cada noventa minutos, el extremo ha enviado, con goles y juego, a Henry a calentar banquillo. Desde Bilbao rugen para que dos leones, Llorente y Javi Martínez, sean pasaportados al sur de África. El papelón que le queda al seleccionador es morrocotudo. No contentará a todos, pero afortunadamente nuestras pegas, frente a otras selecciones, se destacan por exceso de buenos que por defecto de otros asuntos futbolísticos.
Fabio Capello ha conseguido devolver la fe al pueblo británico. Los ingleses se presentan ajenos a las dudas y dispuestos a triturar a cualquiera… hasta la historia del brazalete. Terry era desposeído para nombrar a Ferdinand, quien aún no ha ejercido, mientras Gerrard lo toma prestado y la afición postula al diablo goleador de Manchester o a Lampard como mejores candidatos. Todas estas alteraciones al buen orden del grupo, con bicefalias innecesarias para la caseta, han provocado el cabreo de Capello. El ‘general de Gorizia’ no ha pedido evitar que el lío amoroso del ex capitán salpique y debilite al once. Con Ashley Cole lesionado y Bridge borrado, el lateral izquierdo cojea. Las grietas del vestuario no deberían afectar en el césped, pero Capello maldice ‘el caso Perroncel’.
Tampoco transitan tranquilos en Sudamérica. Brasil, el equipo pentacampeón de Dunga, camina preocupado por la crisis personal y deportiva que afecta a su estrella. Kaká, que ganó el balón de oro en la Copa Confederaciones antes de presentarse como jugador del Real Madrid, no levanta cabeza en el Bernabéu. Mientras acumula días y días lesionado, ni se siente importante ni es feliz. Por eso, la torcida estima que nada mejor que la ‘verde-amarela’ para sacarse la espina y demostrar al mundo que quien tuvo retuvo. Tan seguros están que no reclaman ni a Ronaldinho. Entre tanto, en Buenos Aires, Messi es discutido. Maradona no entiende al mejor jugador del mundo y ‘la pulga’ no ofrece el nivel del Barça. Los celos que provoca en el seleccionador descolocan a la albiceleste. ‘El Diego’ no quiere ceder su pedestal a quien le apremia cada día, pero siempre bajo el yugo de la falta de una actuación grandiosa con Argentina. Por eso, que nadie se amargue con las lesiones, todas curables en plazo. Nuestras cuitas son pecados veniales frente a las dificultades de nuestros principales adversarios.
Escrito por Matallanas | 11:00 a. m. | Enlace permanente