Los Desperdicios no viven sus mejores momentos. Los primeros síntomas de que no iba a ser una buena temporada los di yo dejando de hacer las crónicas de cada partido aquí en el blog. La verdad es que me divertía compartir con vosotros las vivencias de cada partido redactando crónicas apresuradas en las que compartía nuestro vacile y buen rollo. En este sentido he fallado a Quique Estebaranz, el flamante fichaje de esta temporada junto a Piru. El bueno de Quique, era un Desperdicio sin ficha, de los que juegan los partidos benéficos como Pantic, Alfonso o Dani Martín, y una vez que le hicimos los papeles del equipo residual resulta que dejo de escribir las reseñas de los partidos, que era uno de los motivos que más le llamaban la atención para fichar con Los Desperdicios. No prometo nada, Quique, pero intentaré en esta segunda parte de la temporada volver a ir escribiendo partido a partido. O de vez en cuando.

Por más que seamos de la máxima "Ganamos, perdimos, igual nos divertimos", con la que empieza el libro de Eduardo Galeano 'El fútbol a sol y sombra', tampoco apetece mucho escribir cuando no se ganan partidos. Y llevamos una rachita chunga de resultados. La verdad es que en los dos últimos partidos, correspondientes a las dos primeras jornadas del Trofeo Clausura, hemos perdido dos partidos (4-2 y 6-4) que debimos y/o pudimos ganar. La cosa es que cada domingo va siendo un calvario juntarnos siete para jugar el partido de fútbol 7 de la Liga de Majadahonda. Con 23 fichas que tenemos las pasamos canutas para ir siete. Y las bajas casi siempre, por no decir siempre, están justificadas, la mayoría por motivos laborales porque la mayoría de los miembros del grupo curramos en fin de semana. Pero aún así, aunque los ausenten tengan sus motivos, cuando vas a jugar sin cambios o con uno menos, la mala leche que se te pone no se puede evitar por más que haya justificante para los que vienen.

Este domingo hablamos de montar una cena para recuperar el espíritu Desperdicios. Ciertamente no lo hemos perdido nunca, pero esos enojos puntuales los domingos en los que vamos justos y las obligaciones de cada uno provoca que ese distanciamiento se haga inevitable, por más que sigamos unidos por las cadenas de mails. Pues montaremos la cena.

El domingo perdimos, sí. 6-4. Lo tuvimos para ganar. Regresó Paunovic tras su vuelta al fútbol profesional en el Philadelphia Union de la MLS de Estados Unidos. Yo pensé que con su mera presencia dariamos buena cuenta de La Pulpería de Juan. Bueno con su presencia y la de Dani, Santi, Quique, Teja, Boli, Rubio, Rober, Gonza, Omar y un servidor. Pero cuando acabó el partido (a falta de tres minutos íbamos 4-4-), después de dar la mano y felicitar a los rivales, uno del equipo preguntó: "¿Por qué ya no nos hacemos foto?" Y nos hicimos la foto de equipo, como era costumbre, para publicarla aquí en el blog, y en Twitter y Facebook. Aquí la tenéis.