De todos los que nombras en tu "notita", algunos como Enrique Ortego o J.J. Santos han rozado el ridículo y el esperpento en su defensa numantina del Florentimato. Es decir, han incumplido todos los códigos deontológicos del periodismo deportivo serio (el que se hace en EEUU, por ejemplo). Además, intelectualmente son muy pobres.
Por otra parte, se puede ser brillante y rendir vasallaje por intereses como exclusivas, acceso a entrevistas, etc. Es decir, fuera del paraguas del Real MAdrid hace mucho frío en la información deportiva.
Esto no quiere decir que no pueda haber prensa deportiva afín al Madrid. El problema es cuando las voces críticas con una de las operaciones urbanísticas más vergonzosas de las últimas décadas (y no me vale el y tú más) han desaparecido como por arte de magia (García, Azuara, etc).
Nadie ha hecho má daño al MAdrid en los últimos tiempos que los mensajes tipo: evangelizar el mundo, ser superior, en club más grande de las galaxias, etc.
Esto estaba inventado mucho antes de que apareciera Florentino.