mata-dor (marca, miércoles 30 de mayo de 2007)

La Junta Directiva de la Real Federación Española de Fútbol se reunió el pasado viernes en Melilla y, entre los diversos asuntos tratados, acordó la venta de unos terrenos que posee en el término municipal de Vila Real, donde cuenta con unos campos de fútbol que no están siendo explotados, al ayuntamiento de esa localidad (hecho que no se publicitó al comunicar los asuntos tratados por la Junta). En el contrato de compra-venta, la RFEF ha puesto una cláusula por la cual obliga al Ayuntamiento a hacer una Ciudad Deportiva dentro del plan urbanístico en los que se recalificarán esos terrenos de la Federación junto a otros terrenos. Unas fuentes federativas aseguran que la RFEF ingresará en concepto de señal 600.000 euros, y que el gran beneficiado será Fernando Roig, propietario del Villarreal, que sacará ventaja de la recalificación, por una parte, consiguiendo una Ciudad Deportiva para su equipo y, por otra, construyendo en los terrenos recalificados.

Pero una fuente autorizada de la Junta Directiva niega tajantemente que detrás de la compra esté el dueño del Villarreal: “No intervenimos en una operación especulativa, lo vendemos dentro el plan urbanístico del Ayuntamiento donde va una Ciudad Deportiva, y hay una cláusula en la venta al consistorio condicionada a que harán esas dotaciones para jugar al fútbol. Si no es así, los terrenos volverían a ser propiedad de la RFEF”. Esta fuente federativa reconocía que detrás de esta operación subyace que el Villarreal quiere hacer una Ciudad Deportiva, pero aseguró con rotundidad que el club castellonense no está detrás de la compra, como aseguran otras fuentes.