Una contratación que inició Calderón y remató Florentino

El plazo acababa el 15 de junio. Hasta el próximo lunes el Real Madrid tenía tiempo para hacer la oferta al Manchester United, mejor dicho para ejecutar un acuerdo suscrito el pasado mes de noviembre anunciando al equipo inglés que pagaría la cláusula de 80 millones de libras, fijada el pasado verano por Ferguson y refrendada en ese documento privado que está depositado en un notario. Todo se precipitó ayer porque el United hizo la tarde del miércoles una última ofensiva para intentar retener a Cristiano Ronaldo y el agente del portugués les transmitió que no, que se marchaba al Real Madrid sí o sí. No podían hacer nada por retenerlo. El Consejo de Administración del Manchester United se reunió de urgencia ayer por la mañana temprano y emitió el comunicado que convulsionó el planeta fútbol (la CNN interrumpió su emisión para dar la noticia).

En el acuerdo se especifica que la cláusula de 80 millones de libras debe abonarse en un pago único en un plazo de 15 días, del 15 al 30 de junio. Por eso, Florentino Pérez ha reiterado en todas sus manifestaciones públicas que la contratación de Cristiano Ronaldo la acometería este mes de junio y daba en privado la fecha del 30 de junio para rematar la operación. Y eso que Florentino nunca ha faltado a la verdad cuando ha reiterado que el no había visto el contrato suscrito entre el Real Madrid y Cristiano Ronaldo, a través de su agente Jorge Mendes, porque ese documento se encuentra depositado en un notario y no ha tenido nadie acceso desde que se realizó el pasado mes de noviembre. “Me cuentan, me dicen, comentan que hay un acuerdo, pero yo no lo he visto”, ha repetido en las últimas entrevistas Florentino.

Florentino no había visto el contrato, pero lo conocía perfectamente de boca de un ejecutivo del club, que lo preparó y lo redactó junto a otro empleado cualificado del Real Madrid que dejó de trabajar en el club de Concha Espina esta semana, y también sabía todas las condiciones porque se las había contado Jorge Mendes, agente de Cristiano Ronaldo, con quien estuvo reunido semanas antes de ser proclamado presidente. Si quería fichar a Cristiano no contaba con margen alguno de negociación o pagaba los 80 millones de libras o se quedaba sin el portugués.

En ese acuerdo existía una cláusula de penalización, en caso de incumplimiento, para cualquiera de las dos partes de 30 millones de euros (era muy difícil de demostrar el incumplimiento porque el simple de salir a la luz el acuerdo habría provocado una sanción de UEFA al Real Madrid y al jugador por haber negociado con contrato en vigor). Y había unas cláusulas de confidencialidad muy estrictas, hasta el punto de cuando se informaba de la existencia del acuerdo, cualquiera de las dos partes debía salir a desmentirlo públicamente, como hizo Cristiano en varias ocasiones y el Real Madrid en un comunicado oficial el pasado 22 de mayo (ver).

Tipo de cambio libra-euro garantizado desde diciembre
El Manchester recibirá 80 millones de libras en sus arcas, pero el Real Madrid no pagará ni 96 ni 94 ni 93 millones de euros (ayer ninguna información se ponía de acuerdo con el tipo de cambio de libra a euro). El Real Madrid pagará al Manchester United exactamente 85 millones y medio de euros, exactamente 85.561.497, porque suscribió un acuerdo con el Banco de Santander el pasado 20 de diciembre de 2008, como adelantó El Confidencial (ver), que le garantizaba el tipo de cambio de aquel día (1 euro=0,935 libras) para aplicarlo en el momento que acometiera el pago de la cláusula de 80 millones de euros que fijó Fegurson el pasado verano.

La duda y las informaciones confusas estriban en la comisión de Jorge Mendes. El agente de Cristiano tenía garantizada una comisión por la ampliación del contrato que realizó con el Manchester United en 2007 y esa comisión la cobraba del equipo inglés temporada a temporada repartida en un pago anual hasta 2014, mientras Cristiano jugará en el Manchester United. Mendes se garantizó su comisión por el traspaso del Real Madrid en una cantidad similar a la que estaba percibiendo en el United y que ronda los 6 millones de euros, que el Real Madrid también le pagará en pagos anuales, por lo que la operación global, incluida la comisión, asciende a unos 91’5 millones de euros.

Fuentes cercanas al jugador portugués aseguraban ayer que la presión del Manchester United para retener a Cristiano Ronaldo provocaron que el portugués se planteara garantizar y adelantar personalmente el pago de la cláusula, con el compromiso del Real Madrid de reintegrarle después del dinero, si fuera necesario. Pero hasta el 30 de junio el Real Madrid tiene tiempo para hacer el pago único y podría hacerlo a través de un crédito, cuya concesión también tenía avanzada con el Banco de Santander en la etapa de Ramón Calderón como presidente, pero que se podría negociar con otra entidad.

Ahora queda negociar el contrato ente el Real Madrid y el internacional portugués. Aunque las conversaciones se avanzaron hace semanas entre Florentino y Mendes, quedan flecos que concretar. Cristiano firmará un contrato de 6 temporadas por cada una de las cuales percibirá 9,5 millones de euros netos. Cristiano cederá el 50 por ciento de los derechos de imagen (como todos los jugadores del Real Madrid, incluido Raúl, que los cedió cuando realizó su última renovación vitalicia con Calderón). Debido a que una sociedad de Gestifute, empresa de Mendes que representa a Cristiano, gestionaba los derechos de imagen del jugador y perderá ahora esa posición de privilegio, la empresa que gestionaba esos derechos de imagen se guarda una comisión de los nuevos contratos que suscriba a partir de ahora con el Real Madrid. Pero Cristiano cederá el 50 por ciento de sus derechos de imagen al Real Madrid. Pero su contrato es, relativamente, lo de menos, porque también estaba pactado en el acuerdo del pasado mes de noviembre.

Cristiano quería jugar en el Real Madrid y el Real Madrid ya lo ha fichado. Kaká y Cristiano Ronaldo ya son del Real Madrid. Florentino tenía dudas y hace un mes y medio no tenía claro si iba a fichar a Cristiano, pero se convenció de que lo necesitaba y afrontó una contratación en la que no tenía cabida la negociación. El resto de negociaciones abierta (Villa, Silva, Xabi Alonso, Ribery…) no serán tan ‘sencillas’ como la de los dos primeros galácticos. Pero el Real Madrid maneja otras opciones si no salen estos jugadores. Y, la realidad, es que ahora todos quieren venir al Real Madrid para jugar junto a Kaká y Cristiano.