¿Por qué jugamos hoy en Azerbaiyán?
MATA-DOR. ARTÍCULO PUBLICADO EN MARCA
La Real Federación Española de Fútbol manejaba dos opciones para disputar un amistoso antes de la Copa Confederaciones. China y Azerbaiyán. Un millón cien mil euros ofrecían los chinos y 600.000 euros la ex república soviética. Finalmente se aceptó la oferta del país europeo (por 600.000 euros, no por 750.000 como se ha informado) y hoy el combinado nacional juega en Bakú.
No obedeció la decisión a un criterio deportivo ni a un criterio económico. Ninguno de los dos viajes largos agradaba ni a los técnicos ni a los internacionales. Y si se hubiera adoptado por dinero la selección habría viajado a China, que ofrecía más pasta.
Pero a Angel María Villar le interesaba jugar un país perteneciente a la UEFA. Han sido los intereses personales y políticos de Villar los que han primado a la hora de decidir el lugar del amistoso. Por lo mismo, y sin caché de por medio, España jugará en agosto en Macedonia.
La versión federativa para descartar el amistoso en China se escudó en la negativa de Fernando Hierro y Vicente del Bosque de hacer un viaje tan largo. Lo que no cuentan los dirigentes de la Federación es que el director deportivo, el seleccionador nacional y los capitanes también se negaban a viajar a Azerbaiyán por motivos deportivos y que decidió el voto de calidad, la orden, vaya, de Villar.
Angel María Villar maneja la RFEF a su antojo. Es impermeable a las críticas y hace de su capa un sayo. No se apea del burro con el nombramiento de Ramón Calderón como presidente del Centenario de la RFEF, que tan mala imagen está dando a la Federación en cada acto que aparece. Villar busca su beneficio y si coincide con que el beneficio del fútbol español, pues bien. Y si no, pues le da igual. Por eso jugamos en Azerbaiyán hoy. Por el beneficio única y exclusivamente de Villar.
Escrito por Matallanas | 5:39 p. m. | Enlace permanente