Andan los periodistas que cubren el día a día del Real Madrid encantados con Manuel Pellegrini. Esos reporteros que se lo curran, que tienen sus fuentes en el vestuario, algo cada vez más complicado por el aislamiento paulatino que somete el club a sus futbolistas, con la aquiescencia de estos, por supuesto, y que pelean por anticipar cada alineación, que tampoco son muchos, dicho sea por otra parte, han comprobado que los onces que ensaya el chileno en los entrenamientos son los que pone después en el partido.

Eso ha hecho en las tres jornadas ligueras disputadas y todo indica que hoy ante el Villarreal volverá a poner el mismo equipo ensayado en las práctica previa al partido de esta noche El Madrigal. No cambia su forma de actuar por las filtraciones, ya que el periodista no ve nada más que un cuarto de hora de cada sesión de trabajo del Real Madrid y le tienen que contar sus fuentes el equipo con el que ha probado como titular.

Salvo en el partido de Champions ante el Zurich, para el que no ensayó once titular y acertarlo fue una lotería salvo las filtraciones de altas instancias a las altas instancias de algún medio, Pellegrini siempre muestra sus cartas aunque los entrenamientos estén censurados para la prensa.

A tenor del único precedente, da la sensación de que a Pellegrini no le tiembla el pulso a la hora de hacer rotaciones. Lo hizo en Cornellá-El Prat ante el Espanyol, cuando sentó a Cristiano Ronaldo en el banquillo después de que el luso jugará dos tensos partidos con su selección. Y también dejó de suplente a Raúl, quien no había jugado los partidos de España. Según los que controlan de alineaciones, hoy volverá a dejar en el banquillo al capitán y también rotará con Gago y Benzema, dando su sitio a Guti, Higuain y Granero.

El que aún no ha rotado es Kaká. En el parón de selecciones no jugó el segundo partido y regresó antes por lo que estaba menos castigado que sus compañeros. Antes del partido ante el Xerez se apuntó la posibilidad de que rotara y fuera suplente, pero Pellegrini nunca lo ensayó antes por lo que no debió contemplarlo en ningún momento.

También se especuló con que Sergio Ramos volvería, como así fue, pero como central. Pero el internacional finalmente jugó de lateral derecho, donde repetirá también El Madrigal para coger ritmo de competición. Arbeloa estará de baja diez días por lesión y no competirá en ese plazo con Sergio por el puesto. Y Ramos tiene todas las papeletas de jugar siempre de lateral derecho porque ahí gusta más a Pellegrini y a toda la zona noble del Bernabéu, salvo a algún miembro de la dirección deportiva.

Pellegrini no engaña con los onces y su objetivo es engrasar la maquinaria para hacer frente al Barça de Guardiola que anoche volvió a demostrar en El Sardinero que nadie le puede parar, como la pasada temporada. Al Real Madrid de momento le vale con su pegada, pero Pellegrini sabe que tienen que jugar mejor. Ese es su objetivo.