¡Cámbiate a AS!
hoy empiezo a trabajar en el diario as, como adjunto a la dirección
Hoy empiezo una nueva aventura, un reto profesional apasionante. Alfredo Relaño y Alejandro Elortegui se pusieron en contacto conmigo hace unas semanas para trasladarme la posibilidad de trabajar en el diario As y tras unas sencillas negociaciones llegamos un acuerdo que se selló el pasado miércoles y que hoy empieza a ser efectivo. Los rumores se dispararon hace días y muchos me solicitabais, a través de los comentarios aquí en el blog, que os los confirmara, pero, porque no estaba cerrado, primero, y, segundo, por respeto a Abellán (a quien informé de las negociaciones, tanto con el As como como con Marca que también me llamó para volver a tope, desde el minuto uno) no podía contar nada hasta hoy. Llegó un momento en que me felicitaban muchos compañeros, del As y otros medios, y yo… ¡no se lo había contado ni a mis padres!, guardando una discreción impropia de un tipo al que le bautizaron hace años como ‘la tumba’. Será la madurez (risas).
El 13 de enero de 2005, apenas una hora después de haber sido despedido de Marca, José Antonio Abellán me llamó para decirme que ya tenía trabajo. He pasado casi cinco años maravillosos en El Tirachinas y en El Tiempo de Juego, cubriendo la información de la selección española (¡lo que más me gusta del mundo!), haciendo todos los reportajes especiales, dos finales de Champions (la histórica de Estambul de la remontada del Liverpool al Milan), la liga que ganó el Cholo con Estudiantes a Boca, repleta de épica y emoción, la Euro2008 en la que quedamos campeones, he hecho inalámbrico todas las semanas alternando el Santiago Bernabéu con el Vicente Calderón, la inesperada marcha de Florentino y las dos ligas y la convulsa presidencia de Ramón Calderón. He trabajado con la libertad que necesita un periodista que no debería serlo, pero es un privilegio, y esa libertad me la dio Abellán desde el primer hasta el último día, además de su máxima confianza, apoyo, consideración y comprensión.
José Antonio me permitió montar mi chringuito informativo y quitarme el mono de escribir permitiéndome colaborar en Sport, primero, y luego en El Confidencial y Marca, y con los chinos de Titán Sport, claro. En Cope he hecho amigos. Porque un compañero de trabajo no tiene porque ser obligatoriamente tu amigo, pero en Cope dejo gente encantadora (comí con ellos el viernes en De María, como muestra la foto en la que también aparece Juan, maitre y dueño del restaurante de Félix Boix) como Miguel Angel Muñoz, el Rubio, mi socio informativo y mi apoyo desde el minuto uno y amigo desde antes y desde después, Carles Fité, ese catalán solidario que sabe dirigir y transmitir buen rollo, David Sánchez, ese cínico polemista formidable con la nobleza y rebeldía adolescente siempre a flor de piel (ahora vuelve a Radio Marca), Pilar Casado, esa ‘veneno’ entrañable tan profesional que siempre busca mejorar el producto, Isaac Fouto, extremeño de centeno conquistador que no tiene techo, Carlitos Sáez, solidario, currante y con esa ironía que manejan tan bien los inteligentes, Santi Duque, otro currante que siempre suma y aporta al grupo, y mi Superchurry, Gemma Santos, que además de tener la voz más maravillosa de la radio es una trabajadora incansable con un corazón que se le sale hasta su misterioso y atractivo mechón blanco. Y ese Melchor Ruiz con su voz profunda, su experiencia, su oficio y su complicidad. Y ese Carlos Vanaclocha, un torbellino al que el cerebro le funciona más rápido que la boca al hablar, otro tipo de gran corazón. Un equipazo que no tiene precio en el mercado y que garantizan el éxito de Abellán, con la entrañable y eficaz María Jesús que es como una madre cariñosa y exigente para todos. Atrás les dejo, aunque siempre estarán ahí, como Javi Jurado, Munilla, Omar y Baquero. Y a mis hermanos los técnicos Lillo y Javito García, y mis troncos Navalón, Balduque, Mora, Santi y Bermejo. La chispa, las ocurrencias, el ritmo en la narración, el agobio por llegar pronto a los estadios y la inocencia de Javi Pérez Sala. La voz, la armonía y el sentido común y la radio pura que me enseñó Rafa Sánchez (¡qué Ondas tan merecido, Rafael!) Y más compañeros con los que intenté trabajar en armonía como Alvaro Coutelenq o Juanma Rodríguez y el propio Fernando Baquero. Y los colaboradores con los que colaboraré toda la vida com los inigualables Marcos López, Walter García y Quique Guasch (¡ay amigo, si yo te contara!). Y Miguélez, claro, con su Sentimiento Atlético peleando siempre con su periodismo profundo y jacobino. Y Martín Vázquez, sincero siempre, o Manolo Sanchis, elegante... Y mi Kiko Narváez, pero ese jerezano genial, animal mediático, que ya era mi amigo antes, se ha convertido en mi familia, principalmente gracias a ser compañeros en Cope.
El futuro se llama As. Alejandro Elortegui y Alfredo Relaño me han venido a buscar cinco años después. Porque cinco días después de mi despido de Marca ya me llamaron para negociar mi fichaje. En ese momento preferí el proyecto que me ofrecía Abellán, pero ahora han vuelto a por mi y no podía decirles que no porque estas oportunidades no suelen pasar dos veces por delante. Lo sencillo habría sido seguir como hasta ahora, pero en la vida hay que arriesgar y me entusiasma e ilusiona la aventura que me ofrece Relaño en el As. Conozco a muchos de los que serán ahora mis compañeros en mi nuevo periódico y seguro que muchos de ellos dentro de un tiempo, cuando nos vayamos conociendo, significarán lo mismo para mí que lo que significan mis colegas de Cope y los muchos que dejé también en Marca y los que siguen en El Confidencial. Por cierto, en el último mes también tuve una oferta para volver a tope a Marca, donde tenía contrato de colaborador gracias a Sopeña que me volvió a llamar, pero finalmente no se concretó y en As sí han apostado a tope por mí.
Comparto con vosotros mi ilusión, mi esperanza, mi expectación, mi alegría, incluso, mi melancolía por lo que dejo atrás, y la incertidumbre por lo que llega. Pero como dice mi idolatrado Rosendo, viviré como desplante, apretando y ‘to p’alante’. “Todo lo que pasa conviene”, me dijo Del Bosque en conversación telefónica desde Estambul el día siguiente de que me despidieran de Marca aquel enero gélido de 2005. Y va a ser que tenía razón. Y en este otoño cambiado climáticamente de 2009, como canta Serrat en Soneto a Mamá, continúo aprendiendo “que lo sencillo no es lo necio, que no hay que confundir valor y precio y que un manjar puede ser cualquier bocado, si el horizonte es luz y el rumbo un beso…” Hoy empieza todo de nuevo, como cada día en el periodismo y en la vida. ¡Se os quiere!
P.D. Cuando empecé, cuando me llevé el palo, cuando continué currando siempre hubo gente a mi lado apoyándome y siguen estando ahí. El orden es lo de menos y me olvido de alguno fijo. Gracias a Antonio Sanz, a Carlos González, a Jesús Marín, a Elías Israel, a Roberto Palomar, a Sergio Barriocanal, a Alonso, a Hurti, a Garci, a Binyan, a Gerardo, a Fer, al Paredes, a Richi... Por estar ahí siempre. Y a toda mi familia, por supuesto, y mis amigos de siempre. Mamá (¡y tía Pepe!), para que no se me olvide ninguno de los que tanto me quieren sólo citaré a mi Nini, mi querida, mi vida, mi esposa y mi Mario, ese pequeñín para el que vivo desde hace 20 meses, por y para su sonrisa. Y por su felicidad.
Nombramiento en As.com
Escrito por Matallanas | 1:00 a. m. | Enlace permanente