Gol de Messi: Vaya gol de mierda (¿Os suena? Por Alfredo Duro)
¿os suena?
Por Alfredo Duro
Soy del Getafe. Siempre seré del Geta. He trabajado en el club, y estoy orgulloso de ello. He sido socio, y guardo con el mismo orgullo los carnéts de cada época. Hice novillos un montón de veces en los Escolapios para alimentar la historia imborrable de aquel campo de Las Margaritas que nos vió crecer a todos. Allí paseé con la cabeza alta alguna que otra copa ganada con mi equipo del colegio en las ligas de fútbol de Madrid. Allí también fue donde me gané el título de periodista siguiendo para Radio Getafe los avatares del club. Ví como el Getafe se desangró en aquél fatidico curso del 83. Pero se resisitió a morir. Supimos entre todos construir la firme y eterna raíz que ahora nos permite sacar pecho y presumir de nuestro Geta. Por eso está aquí, tan guapo y fardón.
Ahí estuvo Pedro Castro, alcalde loco y futbolero. Un pirado enfermo de azulón que siempre supo entender que el Getafe era la sangre que mantenía vivo el espíritu de un pueblo que es ciudad. Un pueblo que siempre ha sido capital de todos los pueblos del cinturón rojo. Ese cinturón que sólo aparecía en nuestro particular mapa y que el alcalde situaba en un rinconcito de abajo, como hacía el hombre del tiempo en la tele con las Islas Canarias. Tú sabías, querido pitufo, que nada mejor que el Geta para vertebrar la modernidad de la Capital de Madrid.
Pero, sobre todo, estaba Angel Torres. Estabas incluso cuando no te quisieron. Cuando tu vitalidad y tu imparable entusiasmo asustaban a los que negaban la grandeza que tú ya tenías dibujada en esa bola de cristal tallada por sueños que a todos nos confundían. Tú mejor que nadie sabías, Angel, que todo esto era posible y real. Pero tenían que dejarte a ti para guiarlo por ese atajo que los demás nunca habíamos tomado. Era tu gran sueño y lo has compartido con nosotros para que el sueño sea ahora lujuria y frenesí. Por eso como por muchas otras cosas puedes estar tranquilo. Ya nadie volverá a negarte este Getafe de oro azul. Ese Getafe que tantas y tantas veces me contabas cuando devorábamos kilómetros de carretera y también de imaginación.
El mismo Getafe que ahora ultrajan los amantes de la vulgaridad y las migajas. Qué facil les resulta profanar nuestro sagrado templo de sueños cumplidos por una mierda de gol. Sí, el gol de Messi. Un regalo consentido por varios nobles disfrazados de pistacho para el ridículo coro de babosos y cursis que parecen no haber visto nada igual en su miserable existencia. Una mierda de gol, traicionero y rufián, representativo del vil engaño con el que quieren poner nubes y sombras en nuestro cielo azul. Si queréis goles con el sello de la verdad y la gloria eterna poneos de rodillas y suplicad el nombre del dios Pachón. Sus cinco milagros en Tenerife representan lo que nunca tendréis. Goles de verdad, no como el de Messi, insignificante y simple. Una mierda de gol
P.D.: Para Angel, Fernando, Jesús, Luz, Jose, Patricia y Ariana. Vosotros sois mi mejor gol. Gracias eternas.
Duro ¿os suena?
Escrito por Matallanas | 12:27 p. m. | Enlace permanente