Atleti, ¿y ahora qué?
JAVIER GÓMEZ MATALLANAS. El Atlético de Madrid tuvo fichado a Riquelme y lo descartó. Ahora se queda sin Maniche y no tiene a Román. ¿Será suficiente esta plantilla para conseguir el objetivo obligado de esta temporada de clasificarse para la Champions League?
Sin Maniche, el Atlético afrontará el segundo tramo de la temporada con Cleber Santana, Raúl García y Motta como medios centros. Aguirre se debía plantear utilizar a Miguel de las Cuevas, que también puede rendir en esa demarcación como demostró cuando llegó al Atlético, en una pretemporada en la que apuntaba alto hasta que se lesionó de gravedad en Riazor. Y Jurado también podría jugar ahí cerrando el rombo. El problema de Motta es que su rodilla no termina de ponerse a tope, sino sería un fijo para el mexicano. Y el brasileño Cleber Santana, que viene dando síntomas de ser mejor jugador de lo que venía demostrando en los últimos partidos, no acaba de adaptarse a nuestro fútbol. Desde la desaparición de Maniche, incluso Raúl García parece haber bajado un pelín su buen rendimiento, aunque el navarro se antoja el valor más seguro en el centro del campo rojiblanco.
Miguel Ángel Gil Marín declaró ayer que, “en principio”, no habrá fichajes en este mercado invernal. No es que las incorporaciones sean imprescindibles, pero la dirección deportiva ha peinado el mercado para ver la conveniencia y la posibilidad de fichar a algún jugador que aporte (más allá de los Richard Núñez, Pollo Olivera, Avy Nimny o Giorgio Venturin que recalados en pasados mercados invernales y que aportaron poco o nada al equipo). Diego Valeri, volante de Lanús, y Ever Banega, medio centro de Boca Juniors, están en la agenda del Atlético. Hace unas semanas, alguien en nombre del Atlético habló con Ramón Cabrero, técnico que ha hecho campeón a Lanús y ex jugador del Atlético, y preguntó por la posibilidad de fichar a este jugador. Y García Pitarch reconoció en Argentina hace unas semanas que seguían muy de cerca de Banega.
Si Aguirre consigue gerenciar el descontento de sus atacantes, que unos se quejan porque les cambia sistemáticamente a ellos como es el caso de Simao y Reyes, otros, como Luis García, porque no le da las oportunidades que cree que merece, y Forlán y el Kun siguen funcionando, el Atlético mantendrá las posibilidades intactas de cumplir con su obligación de entrar en Champions. Y todo depende de que defensivamente los Pablo, Perea y compañía recuperen su nivel de otros años. Por cierto, Pablo lleva una línea creciente en los últimos partidos.
No se puede volver atrás, pero cada vez se percibe la no contratación de Riquelme como una oportunidad perdida por el Atlético de Madrid. Mucho más tras estallar el asunto Maniche. Un jugador del nivel de Román debería haber jugado en el Atlético. Pero no pudo ser...
P.D. En los últimos días se han acrecentado los rumores que hablaban de la posibilidad de que Albelda y Angulo recalarán en el Atlético. Esas informaciones se sustentan de una supuesta posibilidad legal que se abriría en función de la forma en que sean despedidos ambos jugadores del Valencia. Especialistas en derecho deportivo consultados aseguran que es imposible que un jugador que haya jugado más de cinco partidos juegue en otro equipo español en la misma temporada.
Escrito por Matallanas | 1:23 a. m. | Enlace permanente