De Schuster a Ancelotti
La ley de Murphy arrasa en el Real Madrid. Todo es susceptible de empeorar en el club blanco. Y vale que haya fallos estructurales que arrancan desde la presidencia y bajan por todo el organigrama deportivo. Vale que la planificación no ha sido buena, que no se hicieron los deberes el pasado verano, que la plantilla es justita y descompensada, pero tampoco es normal que se le lesionen a la vez Van Nistelrooy, Robben y Pepe. O que el equipo remonte ante el Real Unión de Irún y le marquen en el último suspiro. No es normal que Raúl se transforme en Julio Salinas y falle el gol que falló ante el Valladolid. No es lógico que si Schuster avisa y trabaja para que los goles no lleguen por la izquierda, por el mismo lado que han llegado la mayoría de los tantos la pasada temporada, en Pucela vuelvan a fallar el lateral y el central zurdo.
Ayer Pedja Mijatovic se llevó un broncazo notable en el estadio Alfredo Di Stéfano cuando acudió a ver el Castilla-Atlético B. Silbaron al director deportivo como hubieran abucheado al presidente Ramón Calderón, al secretario técnico Miguel Ángel Portugal o al entrenador Bernd Schuster, pero el que fue a ver al Castilla fue Mijatovic, nadie más dio la cara porque amenazaba tormenta si daban la cara por el monumental enfado que tienen los madridistas por la mala racha y el mal juego de su equipo.
Todo indica que Bernd Schuster aguantará el tirón y se sentará en el banquillo el próximo sábado en el partido ante el Recreativo. Atentaría contra el sentido común de los dirigentes destituir al técnico y arriesgarse a sufrir un, improbable, tropezón y la gente señalaría directamente al palco, como señalaron a Mijatovic en la zona noble del estadio del Castilla. El objetivo es que pase la tormenta y mantener a Schuster hasta final de temporada. Y ya se empiezan a manejar recambios de cara al próximo curso. El nombre de Carlo Ancelotti, que estuvo a punto de firmar hace tres temporadas como técnico del Real Madrid, está de nuevo sobre la mesa de Calderón. ¿Es Ancelotti lo que necesita el Madrid para conseguir la excelencia? Hay otros asesores del presidente que hablan de Wenger, pero parece haber más consenso alrededor del entrenador del Milan.
Schuster, pese a la sensación que dejan sus planteamientos y ruedas de prensa, no quiere que le echen. El alemán está convencido de que sacará adelante al equipo. Pero las sensaciones que transmite el equipo son muy negativas. Aunque la Ley de Murphy, por más que algunas decisiones de los dirigentes blancos inviten que se cumplan sus preceptos en torno al conjunto blanco, algún día deberá de abandonar al equipo de Concha Espina.
Escrito por Matallanas | 4:41 a. m. | Enlace permanente