¿OS SUENA? Por Alfredo Duro
Dos extraordinarios jugadores
Por Alfredo Duro
El pasado 15 de noviembre, la selección francesa de fútbol jugó un partido amistoso frente a la selección de Grecia. Nada trascendental. Una de estas fechas que la FIFA ha encontrado en el calendario para que se jueguen partidos de selecciones y no se alteren las competiciones de clubes. En España discutíamos sobre la decisión de Luis de “cargarse” a Fernando Torres “para que aprendiera” y la coyuntura fue aprovechada por Rumania y un tal Marica para colocar el nivel de “la roja” a la altura de los principios y la palabra de nuestro seleccionador.
En Francia la discusión se planteaba en términos diferentes; allí no se hablaba de restar sino de sumar. No echaban a nadie sino que invitaban a vestir con el once del gallo a un jovencito argentino que, a pesar de defender la camiseta de River Plate, podía aprovechar su condición de haber nacido accidentalmente en tierras francesas para jugar con 'les blue'. Respondía al nombre de Gonzalo Higuain y su aparición en la escena futbolística convenció a Raymond Doménech para incluirle en una preselección de 30 jugadores y a reunirse con su padre y representante para persuadirle de las ventajas de poder jugar con la camiseta del actual subcampeón del mundo. Higuain decidió no aceptar la invitación, dejó abierta la puerta de la albiceleste y ha acabado fichando por el Real Madrid.
Hablar en el barrio de La Boca de Fernando Gago es hablar del jugador que más exigencia y reconocimiento ha acumulado en los últimos veinte años por parte del aficionado xeneize. Cuesta recordar tanta coincidencia en señalar a un jugador como heredero natural de la 'cinco' albiceleste y no es fácil encontrar a jugadores que después de sus dos primeros años en Primera División hayan respondido de manera tan eficaz y convincente. Su personalidad se ha agigantado desde el primer día que se puso la histórica camiseta boquense y su crecimiento futbolístico ha ido acompañado de una sucesión de títulos y campeonatos en los que siempre ha sido máximo protagonista.
“Gago e Higuain son extraordinarios”. Lo ha sentenciado D. Alfredo di Stéfano con lo cual les ha dado a ambos lo que en Argentina se han apresurado a catalogar como “Respaldo Real”. Si lo ha dicho la máxima autoridad del madridismo no voy a ser yo quien le lleve la contraria. Y no lo voy a hacer por respeto y porque tengo la convicción que, efectivamente, se trata de dos extraordinarios jugadores que responden a un montón de virtudes y condiciones de las que el Real Madrid está enormemente necesitado. Me refiero, entre otras, a cosas tan fácilmente identificables como el talento, la versatilidad, la clase, la personalidad … y la juventud, que han sido justamente los valores que muchos han echado en falta en las contrataciones de este verano.
Otra cosa muy diferente es que los dos sean víctima de la escandalosa tiranía del mercado de traspasos que impera en el fútbol internacional. El precio de su contratación es para algunos el principal elemento de sospecha que pesa sobre su futuro en blanco. De eso no son culpables ninguno de los dos. Lo único que han hecho hasta ahora es jugar muy bien al fútbol y poner en fila a los mejores equipos de Europa y a la selección subcampeona del mundo. A mí, me vale.
Duro ¿os suena?
Escrito por Matallanas | 1:48 a. m. | Enlace permanente