20 años mandando en el ‘furbol’
artículo publicado en elconfidencial.com
Angel María Villar fue ayer reelegido, a lo Fidel Castro, presidente de la Real Federación Española de Fútbol. Villar lleva la friolera de 20 años mandando en el fútbol español y esta última reelección ha sido un paseo militar ya que no se presentó ningún candidato más. En 2004 tuvo que fajarse más y acabó ganando por 20 votos a Gerardo González Otero en unas elecciones muy disputadas que no se decidieron hasta la madrugada anterior.
Durante estos cuatro lustros se ha querido presentar a Villar como un hombre poco preparado, pero su control del fútbol español indican, a priori, todo lo contrario. Villar ha sufrido una campaña de acoso y derribo de manual que no consiguió derribarle. Ha ganado al grupo Prisa, cuyos medios denunciaron irregularidades de Villar y sus directivos que aún están en los juzgados. Y también ha ganado por goleada a Jaime Lissavetzky, secretario de Estado para el Deporte, quien no consiguió mantener la legalidad vigente, por más que se hartó de decir que las elecciones se convocarían en el primer trimestre de 2008 como ordenaba la Orden Ministerial publicada en diciembre de 2007. Pero Villar siempre aseguró que las elecciones se celebrarían en la última semana de noviembre, como finalmente ha sido.
Ayer le votaron 144 de los 165 asambleistas que votaron. 18 votaron en blanco, o sea, en contra de Villar y tres fueron declarados nulos. Villar arrasó y los votos en blanco, aunque la votación fue secreta, pueden venir del estamento de jugadores, ya que la AFE se encuentra muy decepcionada con la gestión de Vilar, especialmente porque al RFEF no ha pagado los partidos que monta para el sindicato de jugadores y adeuda una importante cantidad a este colectivo, después de comprometerse a pagar desde que se montaron estos partidos a beneficio de la AFE.
Se podría criticar a Villar por diversos aspectos de su gestión en todos estos años y quizá no sea su forma de hablar un elemento criticable. Pero resulta chocante que ninguno de sus excelentes asesores hayan conseguido convencer al señor Villar para que acuda a un logopeda y corrija su forma de decir fútbol. Porque teniendo todo absolutamente controlado como lo tiene, parece raro que se arriesgue a una crítica o al cachondeo generalizado, restando importancia a su eficacia como dirigente, cuando se le escucha repetir en su discurso de proclamación, y cada vez que habla, vaya, lo de ‘furbol’ o lo de ‘álbitro’. No le habría costado a Villar corregir este error de dicción, pero directamente pasa. No lo considera necesario para llevar 20 años mandando en el ‘furbol’ español. Pues ‘asín’ será, don Angel María.
Escrito por Matallanas | 2:34 a. m. | Enlace permanente