El "agradable" Dinamo de Kiev
LAS COSITAS DE CAPELLO, LA CAPACIDAD DE HACER GOLES Y LOS ERRORES DEFENSIVOS
"Hay que ver dos cosas. Hemos hecho muchos errores defensivos, pero también hay que valorar al contrario, que hace muy bien el contraataque, con mucha velocidad y calidad. Algunas cositas no me han gustado, pero repito, valora la dificultad del rival". Así contestó Capello tras la goleada del Real Madrid ayer al Dinamo de Kiev. El resultado es engañoso. Los ucranianos contaron con seis ocasiones clarísimas, se pantaron en el área de Casillas con una facilidad pasmosa y si llegan a saber definir estariamos hablando de un resultado de partido de waterpolo. Esa inestabilidad defensiva, no la defensa, sino de todo el sistema defensivo, porque a Cannavaro y a Ramos les llegaban en oleadas, son las "cositas" que no le gustaron a Capello. Ahora queda saber si el técnico italiano va poner el acento ahora en mejorar estos graves desajustes defensivos perjudicando la fase ofensiva de su sistema, que ayer funcionó y el Real Madrid volvió a recuperar esa pegada brutal que casi nunca le ha faltado, ni en los tres últimos años de sequía de títulos.
Manolo Sanchis, que debutó ayer de comentarista en el Tiempo de Juego de la Cope, calificó al Dinamo de Kiev como un equipo "agradable", acertado adjetivo para calificar a un rival desde el punto de vista madridista y desde el punto de vista de Raúl, que se reencontró con el gol y se reivindicó, en esos gestos externos que tanto le gustan, con dos goles, que fueron dos regalitos de los ucrunianos. Le hacía falta a Raúl un partido así, vamos volver a marcar. Los aficionados del Bernabéu corearon su nombre y él se cargó de argumentos futbolísticos para que no se dude de él. Pero este partido de Raúl no es suficiente para que Luis Aragonés cambie su opinión de no llevarle en la lista para el partido ante Suecia.
Y fue "agradable" el Dinamo de Kiev para el Real Madrid por su ilimitada inocencia defensiva y ofensiva y porque permite a Capello seguir cimentando su equipo, porque permitió al Bernabéu ver una goleada, porque permitió a Raúl volver a marcar con la elástica blanca 335 días después de su último tanto y porque el público del Bernabéu (aunque muchos seguidores merengues que van a partidos entre semana europeos no son los mismos que en la Liga) se reconcilió con Ronaldo, recibido por la mayor ovación nunca dispensada al astro brasileño en el coliseo de La Castellana.
Pero los desajustes defensivos, que los propios jugadores querían solucionar entre gol y gol en corrillos en el centro del campo en el que gesticulaban y debatían de la táctica, con Emerson y Diarrá siempre en esas reuniones improvisadas, son preocupantes para un equipo montado para defender, para crecer desde su portería a cero. Vamos, los desajustes defensivos son preocupantes para Capello porque cualquier madridista firmaría ganar 5-1 o ver goles en el Bernabéu, aunque su equipo concediera muchas ocasiones de gol al rival.
"Este equipo puede mejorar en muchísimas cosas y hay que mejorar. Tenemos la capacidad de meter goles y tenemos que crear la capacidad de que no nos los marquen". Leyendo entre líneas a Capello queda claro en el aspecto que insistirá para recibir el domingo al Atlético de Madrid...
Escrito por Matallanas | 12:34 p. m. | Enlace permanente