Cuida tú tu entorno (Por Antonio Sanz)
el rincón de judas. artículo publicado en público
Por Antonio Sanz
Al concluir la jornada catorce de Liga, más de un tercio del torneo, el Atlético se muestra lejos de los objetivos marcados: fuera de los puestos de Europa, prácticamente eliminado de la Uefa y con la Copa inmaculada, sin comenzar la hora de la verdad. Con todo, resulta más fácil iniciar una peregrinación de amistades mediáticas que inviten a la afición a mirar para otro lado. El club también le ha echado una mano, en gratitud al pasado, y ha admitido el fichaje de Elías. En la perspectiva del técnico se antoja un perjuicio sucio en el ambiente. En la mía, quien ha perdido la perspectiva es el entrenador. El vaivén y el mareo al que ha sometido a la plantilla le devuelve a una debilidad que abandonó gracias a efectos secundarios del fútbol -la mano en el área de Perea, el empujón a Zigic o medirte al Liverpool sin su goleador- que le hubieran mandado a casa el 30 de junio. Pero la buena suerte se alió con él hasta lograr un título, que fueron dos, aunque el paso de los meses demuestra que el rival de esa noche en Mónaco difiere mucho del que ganó antes la Champions. En el primero, y en la prórroga, se doblegó a un secundario club de Premier. Eso sí, el Atleti, con Quique, volvió a ser campeón.
Con fama en el gremio periodístico de soplón de élite, el técnico del Atleti se manejó siempre próximo a los poderosos de los ‘mass-media’, circunstancia que posibilitó una excelente imagen pública y un recorrido sencillo en los banquillos. Alcanzó el rojiblanco porque la entidad no pudo contratar ni a Laudrup ni a Spalletti y no se atrevió finalmente con Pantic. Se dio marcha atrás y llegó él. El mismo que se acercó esta primavera al Sevilla. En una cena de empleados del Manzanares, donde se celebraba lo logrado en Hamburgo, uno de sus ayudantes renegaba de algún trabajador hispalense, con quien se hubieran encontrado si Monchi no hubiese peleado por mantener a Álvarez. Después llegaron sus diferencias con Forlán, más tarde el baile de centrales, la marginación de Assunçao, la intermitencia del fichaje más caro del año, Filipe Luis, su exposición pública la noche del Espanyol, el patinazo del Aris, la debacle de Levante…aun así, este Atleti tiene tiempo de enderezarse. Bueno sería que el técnico se centrase en su trabajo y no en buscar fantasmas ajenos a su círculo. Porque Quique, entorno tenemos todos. Tú no eres excepción.
Escrito por Matallanas | 6:53 p. m. | Enlace permanente