mata-dor. artículo publicado hoy en marca

Después del parón de selecciones, que antes veíamos como un incordio en mitad del calendario y ahora hasta se agradece porque ya nos interes, y mucho, nuestra pedazo de selección más allá de las fases finales, regresa la Liga. Este fin de semana regresa la persecución del Real Madrid al Barcelona. Seis puntos los separa y hay 30 puntos en juego. En las últimas diez jornadas, según teorizó hace años Luis Aragonés, se decide el campeonato. El ex seleccionador nacional ha reducido su axioma futbolístico ahora a que las ligas se deciden en las cinco o seis últimas jornadas.

Lo que está haciendo el Real Madrid en esta Liga merece todos los elogios porque si no llega a ser por la triunfal racha el Barcelona ya sería virtual campeón. Los de Guardiola siguen siendo los favoritos. Pasaron un pequeño bache, pero ya han recuperado su mejor nivel. Después de los parones de selección, los equipos grandes, que se quedan en cuadro porque les afecta más a sus plantillas el virus FIFA, suelen tener problemas para sacar sus partidos. Si al Madrid le afecta en Málaga menos la diáspora de internacionales que al Barça en Valladolid, el equipo de Juande podría reducir distancias y meterse en Semana Santa a tiro de liderato. O viceversa.

Se supone que los culés seguirán aguantando bien la presión de los merengues. Pero cuando el equipo blanco les recortó 8 puntos en tres jornadas, el nerviosismo llegó a los culés, no exactamente al equipo sino al entorno porque nadie en Can Barça entierra al Madrid. El Real Madrid ha ganado las dos últimas ligas, pese al caos institucional en el que estaba sumido. Ahora se ha alcanzado la paz social, con la transición y la apuesta por la transparencia de Boluda, y el equipo blanco continuará su persecución al Barcelona hasta el final.